Hace frío, llueve, el gato está profundamente dormido y ganas de salir a la calle no tengo, así que buceo en la web de Martha Stewart en busca de algo que hacer para la fiesta de Halloween que organiza mi hermana mañana, y me encuentro con estos niños calabaza de Jennifer Murphy, una artistaza de los muñequitos. Pasad por su tienda y quedaréis encantados.
Los materiales son asequibles, y los tenía por los cajones tejeriles, y el proceso no parecía difícil para una tejedora nula costurera, así que me he animado a hacer mi niño calabaza. En las fotos lo podéis ver, se ha paseado por toda la casa buscando su sitio. Los de la artista son muy monos. El mío es bastante más feo, pero también más estremecedor. ¡Ja, ja, pobrecillo!
Con fieltro de diferentes colores, hilo de cera, de pescar o dental, relleno (restos de lana, papelajos, guata, rafia...), hilo negro y aguja. Recortáis círculos de fieltro de diferentes tamaños, pasáis el hilo de cera por toda la circunferencia y apretáis para que coja forma esférica. Meted el relleno y seguid presionando hasta cerrar del todo la bola. Por eso tiene que ser un hilo de cera o dental, que son resistentes y no se romperán. Con hilo negro se dibujan las marcas de la calabaza pasando la aguja de arriba a abajo. Para unir la cabeza y el cuerpo podéis utilizar un alambre o con cola universal. Con más fieltro le dais ojos y boca, y con más útiles, que pueden ser cincuenta mil cosas, se le pueden poner brazos, piernas... Yo le he hecho una corbatita con cinta verde y unos piecitos con fieltro para que se sostenga bien.
Podéis ver el vídeo con las instrucciones paso a paso para hacer vuestro propio niño calabaza, aquí, y no os asustéis si no entendéis el inglés porque gracias a las imágenes el proceso es muy claro. ¿Qué os parece?